Por: Oscar Sierra Pandolfi
(Versión hondureña/latinoamericana universal, sin nombres propios, solo crítica estructura
- Amarás la burocracia sobre todas las cosas.
Y llenarás formularios eternos en lugar de enseñar.
Porque nada educa tanto como la papelería inútil.- No tomarás el nombre de la calidad educativa en vano…
…a menos que sea para un discurso institucional lleno de humo.- Santificarás el currículo desactualizado.
El que funcionaba en 1987 sigue “vigente”.
La tecnología es opcional; la tiza es eterna.- Honrarás al supervisor y al jefe del jefe del jefe.
Aunque no aparezcan en la escuela desde hace tres administraciones.- No matarás el espíritu crítico.
Solo lo adormecerás con tareas mecánicas y memorización absurda.- No cometerás actos de innovación sin permiso.
La creatividad debe ser autorizada por tres departamentos distintos.- No robarás… oportunidades de aprendizaje.
Pero por si acaso, recortarás talleres, arte, deportes y laboratorios.- No levantarás falso diagnóstico pedagógico.
Pero sí podrás decir: “El problema es que el estudiante no pone de su parte.”- No desearás los recursos del prójimo.
Porque nunca llegarán a tu centro educativo.- No codiciarás una infraestructura digna.
Acepta los pupitres cojos como parte del plan divino.